Informe Anual de Derechos Humanos Chile 2008, Universidad Diego Portales, Archivo PDF, 582 páginas, Archivo formato PDF, extracto.
Capítulo Derechos de niñas, niños y adolescentes, p. 237
I. Vulneración a los derechos de niños y adolescentes al interior de las escuelas, p. 238
1. Inequidad y segmentación en la educación, p.240 -241
“…En el período analizado se conocieron dos datos muy preocupantes sobre la evolución experimentada por los indicadores de inequidad de la educación entre el año 1999 y 2006 (año de la última medición disponible).
El primer dato da cuenta de que la enorme brecha que en 1999 separaba a los niños más pobres de los más ricos, en términos de sus niveles de aprendizaje y rendimiento en las pruebas de medición de desempeño escolar (SIMCE y PISA), no sólo no ha sido reducida sino que ha tenido un claro aumento, tanto en las pruebas de lenguaje como en las de matemáticas, aumento que (en el caso del SIMCE) pasa por un alza en los puntajes del quintil más rico y una baja en los del quintil más pobre6 (y no, por ejemplo, en una diferencia en el ritmo de crecimiento de puntajes en ambos quintiles). Como lo señala el autor del estudio que reveló este dato, el sistema escolar chileno ha generado –cada vez más claramente– ganadores y perdedores7.
El segundo dato da cuenta de que en Chile la tasa de concentración de los alumnos más pobres en determinadas escuelas (las de peor rendimiento) es altísima y, más encima, va aumentando en el tiempo8. Este indicador, denominado “tasa de segregación escolar” explica que en Chile no sólo los pobres van a las escuelas públicas (estadísticamente, las de peor rendimiento) sino que los más vulnerables de entre los pobres se concentran cada vez más en ciertas escuelas públicas, incluso, al interior de las comunas más pobres del país.
Comparativamente, Chile tiene la tasa de segregación escolar más alta de los cuarenta países que rindieron la prueba PISA el año 2000, y sus niveles de segregación aumentaron entre 1999 y 2006. De modo que si en Chile los pobres viven confinados en ciertas comunas, los niños más pobres viven confinados en las peores escuelas, aun dentro de esas mismas comunas, que terminan convirtiéndose en escuelas pobres (y de mala calidad) para los más pobres. Con ello, sus posibilidades de beneficiarse del contacto con alumnos más aventajados, que mejoren el nivel de la escuela, así como de encontrar espacios de integración social, que generen redes y relaciones entre niños de diversos grupos socioeconómicos, son cada vez menores.
Según el mismo estudio, una causa directa de este fenómeno de segregación escolar es el sistema de financiamiento compartido, introducido a inicios de la década de 1990. Este sistema, al aumentar el número de escuelas particulares subvencionadas –incluso en las comunas pobres– que exigen un pago por parte de los padres, incorpora una subdiferenciación en la educación entre “los más pobres” y “los menores pobres” de la comuna, estos últimos concentrados en escuelas con mayor rotación de profesores y mayores tasas de abandono.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario